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El papel de la mujer en el desarrollo científico y tecnológico ha sido crucial a lo largo de la historia. Desde pioneras como Rosalind Franklin, cuya contribución fue clave para descubrir la estructura del ADN, hasta investigadoras contemporáneas que impulsan soluciones en áreas como la salud o la sostenibilidad, las mujeres han sido y son motor de progreso e innovación. Sin embargo, en muchas ocasiones, su legado ha sido silenciado o minimizado.
Este histórico segundo plano al que la mujer ha sido relegada en el ámbito científico es uno de los factores que explican la realidad actual que observamos: en España la participación femenina en carreras STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas) continúa siendo limitada. A pesar de que en el curso 2022-2023 estas representaban el 57% de los estudiantes de grado, sólo el 34% del alumnado de carreras científico-tecnológicas eran mujeres, según los datos recogidos en el Informe CYD 2024.
“La igualdad de género en el ámbito de las ciencias es crucial para construir un futuro mejor para todas las personas. Sin embargo, las mujeres y las niñas siguen enfrentándose a barreras y prejuicios sistémicos a la hora de emprender carreras científicas”, declaraba el pasado 11 de marzo con motivo del Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia el Secretario General de la ONU, António Guterres. “Cerrar la brecha de género en la ciencia requiere derribar estereotipos, promover modelos de conducta que inspiren a las niñas, apoyar el avance de las mujeres a través de programas específicos y fomentar entornos inclusivos mediante políticas y medidas que promuevan la inclusión, la diversidad y la equidad”.
En este sentido, el sector biotecnológico se erige en nuestro país como un referente. Cada vez más estudiantes buscan en la biotecnología su futuro profesional. Desde el curso 2015-2016 el número de estudiantes matriculados en estudios universitarios de biotecnología de grado o máster ha aumentado un 25%. En 2022-2023, último periodo con datos disponibles, se superan ya los 9.300 alumnos entre máster y grado, de los que más del 60% son mujeres., según el último Informe AseBio.
Desde hace siete años, la participación de las mujeres en el sector biotech está por encima del 50% y, desde 2020, se mantiene el porcentaje de representación en el 53%. El 60% del personal dedicado a actividades de I+D en las empresas biotecnológicas son mujeres, y estas representan el 29,2% de los equipos directivos de las empresas biotecnológicas.
A pesar de los datos positivos que muestra el sector biotecnológico en España, el camino que todavía queda por recorrer es largo. Conscientes de ello, desde AseBio, junto con la Plataforma de Mercados Biotecnológicos, trabajamos en iniciativas como el programa de emparejamiento “Un día con una Mujer Biotech”, que el pasado 11 de febrero presentaba su tercera edición. Un programa que tiene como objetivo dar a conocer a las mujeres estudiantes cómo funciona y se trabaja en una empresa biotecnológica, así como las distintas salidas profesionales que ofrece el sector.
A lo largo de sus tres ediciones esta iniciativa ha trabajado para poner de relieve el lugar esencial que ocupan las mujeres para impulsar innovaciones que a través de la biotecnología contribuyen a cuidar y mejorar la salud de las personas y proteger la sostenibilidad del planeta.
Desde la celebración de su primera edición en 2023, 315 estudiantes de 9 universidades socias de AseBio han presentado su candidatura para participar en el programa. El interés no ha sido menor por parte de las empresas de AseBio con la participación de 38 mujeres de 31 compañías biotech o entidades gestoras de fondos de capital riesgo.
En concreto, la presente edición, ha registrado récord de candidaturas de estudiantes interesadas con un total de 165 de las que 13 han sido seleccionadas para conocer de la mano de 13 mujeres profesionales del sector biotecnológico cómo se trabaja en este y las salidas profesionales que puede ofrecer.
“El sector biotecnológico puede presumir de ser punta de lanza en lo referente al liderazgo femenino, por lo que es fundamental continuar trabajando en esta dirección y que se reconozca y respalde el papel de la mujer en todos los niveles de la industria biotecnología”, expresa la presidenta de AseBio, Rocío Arroyo.
“Iniciativas como ‘Un Día con una Mujer Biotech’ son una oportunidad única para que las jóvenes, el talento que hoy se está formando, conozcan de primera mano las opciones profesionales que las compañías biotech pueden ofrecerles en un futuro, mientas que para las profesionales del sector supone un enriquecedor intercambio de conocimiento y experiencias que contribuyen a acercar la visión empresarial al mundo de la academia”, concluye.
