Empresas Premium
El programa L’Oréal-Unesco For Women in Science ha entregado sus premios a las investigaciones realizadas por cinco científicas españolas menores de 40 años que han destacado por sus trabajos pioneros en el ámbito de las ciencias de la vida.
Estos premios, que se otorgan cada año y están dotados con 15.000 euros, tienen como objetivo reconocer el liderazgo femenino y, concretamente el talento joven, en el ámbito científico.
El Programa L’ORÉAL-Unesco For Women in Science lleva presente en España desde hace más de dos décadas y durante este tiempo ha reconocido la labor de 77 científicas en nuestro país, apoyando sus investigaciones con más de 1,2 millones de euros, contribuyendo así a impulsar su visibilidad y animando a las futuras generaciones de mujeres a desarrollar su carrera en este ámbito.
El cáncer colorrectal ha sido el foco de una de las investigaciones premiadas este año. Se trata del trabajo de la científica Jone Mitxelena (Barakaldo, 1985), de la Universidad del País Vasco (UPV/EHU), cuyo propósito es entender los mecanismos moleculares implicados en la diseminación de este tipo de cáncer como vía para desarrollar tratamientos más efectivos.
Por su parte, la investigadora de la Universidad de Málaga, Melissa García (Málaga, 1985), se centra en desvelar la comunicación entre las células inmunes y las endoteliales (las que se encuentran en el revestimiento interno de los vasos sanguíneos, los vasos linfáticos y el corazón) en el microambiente tumoral. El objetivo principal de este proyecto es identificar nuevos factores implicados en su intercomunicación, hallando nuevas dianas terapéuticas y biomarcadores que favorezcan el desarrollo futuro de fármacos que permitan frenar la progresión tumoral.
El proyecto de investigación de Ana Belén Pérez Oliva (Murcia, 1981), investigadora en el Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria (IMIB-FFIS), tiene como objeto el inflamasoma, un conjunto de proteínas que intervienen en los procesos inflamatorios y que puede suponer una nueva diana terapéutica para tratar las anemias congénitas; es decir, aquellas que no dependen de los niveles de hierro. El propósito de su labor es mejorar la vida de los pacientes de esta afección, cuya prevalencia en nuestra sociedad es considerablemente alta y para la que actualmente solo existen tratamientos paliativos. Para ello, se centra en averiguar el papel de este conjunto de proteínas en la regulación de la producción de glóbulos rojos, o eritropoyesis.
Las enfermedades neurodegenerativas centran otro de los proyectos premiados este año por L’Oréal y la Unesco. En particular, se trata del trabajo de la investigadora de la Universidad Autónoma de Barcelona Natalia Sánchez (Barcelona, 1981), quien busca esclarecer la relación entre la microbiota intestinal y el desarrollo de este tipo de enfermedades. Su labor puede tener una gran influencia en la forma de entender las enfermedades neurodegenerativas e inspirar, por tanto, terapias alternativas para su prevención y tratamiento.
Por último, el daño cardiovascular y, en concreto, la aterosclerosis y los aneurismas aórticos, es una de las principales causas de mortalidad en adultos en países occidentales. Por esta razón, Nerea Méndez Barbero (Madrid, 1985) centra su trabajo en el Instituto de Investigaciones Sanitarias Fundación Jiménez Díaz en su prevención a través de la identificación de los pacientes de mayor riesgo. Su metodología se basa en la localización de señales moleculares de comunicación celular que suceden en la pared de los vasos sanguíneos en las etapas iniciales de la enfermedad.