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El 20 de junio se celebró una nueva jornada de ISPE en torno a la problemática de los distintos requerimientos existentes a la hora de satisfacer los requisitos de prevención y calidad. La masía de la academia Grifols en Parets del Vallès albergó el acto, que tuvo una gran acogida -más de 100 asistentes- por parte de distintos laboratorios y proveedores del sector farmacéutico.
La jornada se inició con la presentación de Gastón Ariel Estruch, Operations Manager de Gentec, titulada “Pensar en alta potencia – mezclar la seguridad con las GMPs”, en la que mostró cómo llevar a cabo el inicio de una pequeña planta con sustancias de alta potencia desde su concepción, desarrollo, problemática encontrada y decisiones estratégicas tomadas para conseguir cumplir con todos los requisitos. Por último, señaló con acierto que el límite más estricto lo ponemos nosotros mismos, aplicando sentido común y voluntad de preservar la seguridad y salud de nuestros compañeros como objetivo primordial.
Alberto Carazo, director de Azierta, se centró en presentar “El reto de introducir APIS de alta potencia en plantas actuales”. Esta dinámica presentación ofreció un marco claro y definido de las reglas de juego, aclaró ciertos conceptos y mostró el camino para llevar a cabo un proyecto de estas características con las mínimas garantías que exige el marco regulatorio y el mercado.
Ana Fernandez Lobato, directora de Seguridad y Medio ambiente del Grupo Rovi, cerró las presentaciones con un caso práctico: “Introducción de un producto de alta potencia en una planta multiproducto”, mostrando problemas tangibles, disyuntivas, soluciones y ejemplos de cómo evoluciona en el tiempo un proyecto serio, maduro y riguroso.
La jornada terminó con un coloquio sobre requisitos enfrentados GMP - EHS, medidas técnicas concretas y reglas del juego. La introducción de sustancias de alta potencia es una cuestión regulada en la que las normas vienen fijadas por las disposiciones normativas de los organismos reguladores que, a través de sus representantes, interpretan el marco regulatorio. Desde ISPE dan recomendaciones técnicas ofreciendo sus conocimientos y el de sus colaboradores para mejorar la calidad y seguridad de los procesos y productos del sector.
La presencia en la jornada de la agencia catalana y de representantes del Instituto de Seguridad y Salud en el Trabajo dio un plus de calidad a la misma, completando las distintas inquietudes y retos a los que se enfrenta el sector farmacéutico en el día a día. Por parte de ISPE, Ignacio Alonso (Insud Pharma) y Daniel Ballarin (GSK) compartieron experiencias propias en el coloquio final e intentaron dar respuesta a algunas de las cuestiones que surgieron durante el encuentro.
Debido a la excelente acogida e interés de la jornada, ISPE prevé repetirla en otoño, en Vitoria.
