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La III edición del Congreso Nacional de Relaciones Institucionales (CNRI), que ha tenido lugar recientemente en el Hospital Universitario Ramón y Cajal de Madrid, puso de manifiesto la necesidad de avanzar en un modelo de medición de resultados que mejore la eficiencia del actual Sistema Nacional de Salud (SNS). Este fue el reto más repetido en la jornada del CNRI, que reunió en torno a 200 profesionales de la industria farmacéutica, la Administración sanitaria, gestores, médicos, farmacéuticos y responsables políticos del área de sanidad.
Sobre la gestión basada en resultados debatieron la consejera de Salud de Baleares, Patricia Gómez Picard, el consejero de Sanidad de Castilla y León, Antonio María Sáez Aguado y el consejero de Sanidad de Extremadura, José María Vergeles Blanca, con la moderación del ex consejero de Sanidad de Cataluña, Boi Ruiz. Todos coincidieron en la gestión basada en la evidencia en los niveles micro y meso, y en cómo alinearla con la gestión basada en resultados a nivel macro, y también, en cómo explotar los datos de esta medición.
La consejera de Salud de Baleares afirmó: “Tenemos poca participación en los debates más interesantes tales como el precio o la incorporación de nuevos productos”. Por su parte, el consejero de Castilla y León señaló que se está produciendo un cambio de paradigma a pesar de que existen algunas barreras y ha reconocido que medir resultados “no es fácil ni en la práctica clínica ni en el mundo sanitario en general”. Por último, el consejero de Extremadura se definió como un “convencido en la gestión basada en resultados” y señaló: “Tenemos datos clínicos, buenos sistemas de información y una gran cantidad de datos que muchas veces no sabemos que los tenemos. La asignatura pendiente es desarrollar un buen sistema de explotación basado en el Big Data”.
En cuanto a los cambios legislativos referentes a la Sanidad, el portavoz de Ciudadanos en la Comisión de Sanidad del Congreso, Francisco Igea, y la portavoz de Podemos en la Comisión de Sanidad de la Asamblea de Madrid, Mónica García, expusieron sus dudas sobre la legislación actual y su capacidad de resolver los problemas de sostenibilidad del Sistema Nacional de Salud.
“En los últimos cinco años la legislación ha cambiado a golpe de decreto. Desde Podemos creemos que hay una orfandad legislativa en el terreno sanitario si tenemos en cuenta que el entorno macro que engloba a todas las leyes del sector se creó en 1986”, explicó la representante de Podemos, que solicitó una mayor transparencia en los procesos de incorporación de la innovación. El representante de Ciudadanos hizo hincapié en la falta de recompensa a la investigación útil de nuevos antibióticos, la gestión de la hepatitis C y la fuga de profesionales sanitarios al extranjero: “Lo primero que hay que plantearse es cuánto vale un mes de vida de un paciente. Hasta que eso no se aclare no sabremos si nuestro sistema es sostenible o no”.
Durante la sesión destinada a los diálogos entre Administración sanitaria e industria farmacéutica, el director general de Coordinación de Asistencia Sanitaria de la Comunidad de Madrid, César Pascual, ha destacó: “El problema real es que nuestro sistema se quedó anclado en el siglo XIX y para lograr que sea eficiente hace falta un cambio en la organización”. En este sentido el presidente de Lilly España, Javier Ellena, defendió que el cambio de sistema es necesario ante la transformación de la demanda (debido al envejecimiento de la sociedad y la cronicidad) y de la oferta (debido a la explosión científica, medicamentos disruptivos y nuevo instrumental): “El cambio no será posible si no se miden los resultados de forma correcta y esto se pone en evidencia cuando se comparten los datos tarde y mal”. Ante la pregunta de si creen que el sistema se transformará finalmente, ambos han estado de acuerdo en que esto es inevitable. “El modelo cambiará, pero si no sabemos a dónde queremos dirigirnos, lo hará hacia donde no queremos llegar”, apuntó Pascual.
En relación a la infrafinanciación del SNS, el gerente del Servicio Gallego de Salud (SERGAS), Antonio Fernández Campa, afirmó que nuestro sistema sanitario es “un modelo de éxito si se tiene en cuenta que se da un buen servicio con un menor gasto sanitario per cápita que otros países”. Por su parte, el director general de Boehringer Ingelheim España, Timmo Andersen, incidió en el problema del cortoplacismo presupuestario: “Realmente se trata de un presupuesto anual y no de una financiación a medio o largo plazo”.
“Deberíamos pensar si somos capaces de responder a las necesidades de la sociedad y pensar no en el paciente, sino como el paciente”, remarcó la directora del Instituto Catalán de Salud, Candela Calle. Por su parte, el director general de MSD, Ángel Fernández, señaló: “Un paciente con buen tratamiento y seguimiento contribuirá de forma más positiva a la sociedad, vivirá más y mejor y tendrá un menor coste para el SNS” y añadió: “Se ha puesto al paciente en el centro del sistema para lograr un resultado, pero si no lo medimos es difícil que tengamos éxito”.
Durante el debate sobre la incorporación de fármacos innovadores, el director de Investigación e Innovación de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria (SEFH), José Manuel Martínez Sesmero, definió innovación como los resultados en salud esperados en un paciente desde una perspectiva de eficacia, competitividad y conveniencia. En este sentido, el director general de Novartis Oncology, Gabriel Galván, hizo hincapié en la necesidad de definir parámetros objetivos y compartidos de evaluación y medición que justifiquen la inversión en innovación, asegurando el máximo beneficio en la salud de los pacientes.
El exdirector general de Coordinación de la Atención al Ciudadano y Humanización de la Asistencia Sanitaria de la Comunidad de Madrid, Julio Zarco, explicó que la humanización “es una manera de entender el sistema, de entender el trabajo de todos los profesionales sanitarios que tienen contacto con el paciente. Es un concepto que va más a allá del acompañamiento del paciente”.
Julio Zarco defendió la necesidad de cambiar el estilo directivo y el liderazgo de los profesionales sociosanitarios para generar un cambio de las estructuras sanitarias.