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Se analizan los riesgos ligados a una línea de fabricación y se examina la manera de mantenerlos controlados.
Hasta ahora la denominación “línea de producción” se ha aplicado, de manera genérica, al conjunto de equipos e instalaciones accesorias que permiten fabricar un determinado tipo de producto. En la mayoría de casos los equipos trabajan separadamente, con una honrosa excepción, la de las líneas o trenes de envasado en las que, desde hace tiempo, pueden entrar formas farmacéuticas a granel o en su acondicionamiento primario y salir palets listos para ser expedidos. Y sin embargo, con la idea cada vez más vigente de “producción continua”, llegará un momento en que las líneas de producción serán precisamente esto, unidades de producción en las que entrarán materiales y podrán salir palés de producto terminado.